El municipio se ha unido además a la iniciativa de otros pueblos de la geografía española para que las fiestas de Moros y Cristianos sean Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
La primera parte de la representación de la obra ‘Triunfo del Ave María’, el texto que representan los Moros y Cristianos de Montejícar, tendrá lugar este jueves, después de la procesión de la Virgen de la Cabeza, patrona de la localidad, a las siete y media de la tarde.
El final de las representaciones será el domingo, 11 de agosto, en la Plaza de la Constitución, a las siete y media también, antes de regresar a la ermita con la patrona, informa el Ayuntamiento.
En estas fiestas, que pregonará la escritora Encarnita Barrera, nacida en la localidad, hay programadas actividades para todos los gustos y todas las edades, pero destacan especialmente, además de los Moros y Cristianos, la carrera de autos locos, que se disputará el viernes a las siete y media de la tarde; una pintoresca y divertida «competición» que ha despertado el interés de medios de comunicación de todo el país.
Son características de las fiestas de Montejícar otras iniciativas como la invitación del Ayuntamiento a «papas» fritas a lo pobre, en la madrugada del sábado al domingo, en torno a las cinco de la mañana, para «entonar» el cuerpo, siempre con la compañía de al Asociación Musical Virgen de la Cabeza.
En el plano musical, se ha programado el concierto de canción española con algunos de los concursantes de ‘Se llama copla’ (Juanfran, Cristina Serrano, Maite y María Carmona) que será el domingo, a partir de la medianoche.
La alcaldesa de Montejícar, Remedios Moraleda, ha mostrado su agradecimiento a todas las personas y asociaciones que colaboran «en todos y cada uno de los eventos de cualquier índole que prepara este Ayuntamiento, consiguiendo que, con más imaginación que recursos económicos, y una buena dosis de generosidad, hagan que el pueblo de Montejícar sea conocido más allá de sus fronteras».
MOROS Y CRISTIANOS
Los Moros y Cristianos de Montejícar se vienen representando desde probablemente después de la Reconquista de la villa por parte de los Reyes Católicos.
En torno a 1860, Doña Isabel Abril y Ramírez de Arellano, de Granada, pero con orígenes montejiqueños y casada en el pueblo, financió el ropaje, las armaduras y todo lo necesario para que se celebrasen las representaciones de Moros y Cristianos. El libreto con el texto original se perdió en la guerra civil. En 1945 se adaptó la obra ‘Triunfo del Ave María’, cuya representación se ha venido sucediendo año tras año, gracias a las nuevas generaciones que han ido cogiendo el relevo.
En la obra se desarrollan dos tramas paralelas, una militar y romántica, y otra religiosa, que pone el acento en el triunfo de la Virgen, el amparo y apoyo que da a los cristianos que creen en ella y la tienen como patrona. Durante la representación, se suceden las batallas entre cristianos y moros, en las que unos y otros van capturando la imagen de la Virgen de la Cabeza, hasta que al final queda en poder de los cristianos.